Aunque ya me ganaron la premisa de comentar la película, no puedo dejar pasar la oportunidad de poner en unas líneas generales mis impresiones sobre la última obra de Quentin Tarantino.
"Basterds" parecería ser la excusa perfecta para mostrarnos un baño de sangre digno de la mejor película gore de la historia, y al ver los avances nos imaginamos que así va a ser, al tratarse de un grupo de soldados que se encargan de tratar a los nazis con los mismos métodos sanguinarios y crueles con que los nazis tratan a sus víctimas; sin embargo, Tarantino ofrece un desarrollo impecable tanto de los personajes como del manejo de la trama: primero nos presenta al antagonista Hans "The Jew Hunter" Landa, un verdadero Sherlock Holmes en lo que se refiere a atrapar judíos usando dotes casi telepáticas de detective. Encantador, carismático, educado, Landa explota cada faceta antes de dar el golpe final, así que uno se queda con la duda de acerca de cuanto sabe, hasta el final. Un villano que incluso provoca más simpatía que varios de los "chicos buenos".
Por el otro lado tenemos a los Basterds, lidereados por Aldo Reine, un oriundo de Tennesse con sangre y complejo de apache, salvaje, directo y con un fin bastante establecido: matar tantos nazis como se pueda, y conservar sus cabelleras como recuerdo.
Otro pilar importante de la historia es Shosanna, la única sobreviviente de una familia que fue descubierta por Landa. A Shosanna la encontramos como propietaria de un pequeño cine que está por convertirse en el escenario de una verdadera masacre. Hostigada por Zoller, un joven soldado/actor que al principio hasta luce como galán de comedia romántica, y de frente a Landa otra vez, Shosanna decide que el Tercer Reich tiene que caer en la gran noche del estreno de "Orgullo Nacional".
Los elementos están servidos para que Tarantino dirija esta película muy a su estilo, encontrándonos con situaciones dramáticas que se mueven hacia el humor negro y un par de veces incluso rosa la comedia de enredos (la secuencia de la taberna es de lo mejor que le he visto a Tarantino respecto a moverse de un estilo a otro en fracciones de segundo, además que todo aporte que hace Stiglitz, aunque sea poner cara de perro asesino, es delicioso).
Algunos dirán que es aburrida. Les concedo que al principio me pareció un poco lenta, pero conforme los personajes iban adquiriendo peso, incluso se me olvidaron las falsas ilusiones de película gore que yo me había hecho.
Un Humbertcricio de cabelleras nazi, y El Señor de las Moscas me debe cien cabelleras. ¡Y yo quiero mis cien cabelleras!
"Basterds" parecería ser la excusa perfecta para mostrarnos un baño de sangre digno de la mejor película gore de la historia, y al ver los avances nos imaginamos que así va a ser, al tratarse de un grupo de soldados que se encargan de tratar a los nazis con los mismos métodos sanguinarios y crueles con que los nazis tratan a sus víctimas; sin embargo, Tarantino ofrece un desarrollo impecable tanto de los personajes como del manejo de la trama: primero nos presenta al antagonista Hans "The Jew Hunter" Landa, un verdadero Sherlock Holmes en lo que se refiere a atrapar judíos usando dotes casi telepáticas de detective. Encantador, carismático, educado, Landa explota cada faceta antes de dar el golpe final, así que uno se queda con la duda de acerca de cuanto sabe, hasta el final. Un villano que incluso provoca más simpatía que varios de los "chicos buenos".
Por el otro lado tenemos a los Basterds, lidereados por Aldo Reine, un oriundo de Tennesse con sangre y complejo de apache, salvaje, directo y con un fin bastante establecido: matar tantos nazis como se pueda, y conservar sus cabelleras como recuerdo.
Otro pilar importante de la historia es Shosanna, la única sobreviviente de una familia que fue descubierta por Landa. A Shosanna la encontramos como propietaria de un pequeño cine que está por convertirse en el escenario de una verdadera masacre. Hostigada por Zoller, un joven soldado/actor que al principio hasta luce como galán de comedia romántica, y de frente a Landa otra vez, Shosanna decide que el Tercer Reich tiene que caer en la gran noche del estreno de "Orgullo Nacional".
Los elementos están servidos para que Tarantino dirija esta película muy a su estilo, encontrándonos con situaciones dramáticas que se mueven hacia el humor negro y un par de veces incluso rosa la comedia de enredos (la secuencia de la taberna es de lo mejor que le he visto a Tarantino respecto a moverse de un estilo a otro en fracciones de segundo, además que todo aporte que hace Stiglitz, aunque sea poner cara de perro asesino, es delicioso).
Algunos dirán que es aburrida. Les concedo que al principio me pareció un poco lenta, pero conforme los personajes iban adquiriendo peso, incluso se me olvidaron las falsas ilusiones de película gore que yo me había hecho.
Un Humbertcricio de cabelleras nazi, y El Señor de las Moscas me debe cien cabelleras. ¡Y yo quiero mis cien cabelleras!
Pues si, teoría comprobada, la dicha del agandalle es grande. A estas horas de la mañana, me he reido bastante.
Quizá vaya al cifrhs y obtenga ahi las cabelleras que te debo.
Feco
13 de octubre de 2009, 4:59
Estupenda película, de los mejor que he visto en algun tiempo! Saludos.
B
13 de octubre de 2009, 12:36